Porque el destino mira siempre al frente, tomó impulso y saltó al vacío. Había
retrasado demasiado ese momento por temor a lo desconocido. Ahora la nada
la acariciaba con sus manos frías mientras descendía en caída libre alejada ya
de todo sufrimiento. Parecía como si estuviera nadando en un vaso gigantesco
de agua transparente y creía sentir algo parecido a la felicidad olvidada. Su
cuerpo se agitó de repente al extenderse la enorme tela y divisó desde lo alto,
aún diminutos, a sus compañeros de la escuela militar. Se sentía una heroína
surcando los cielos.
———————————————————————————————————-
Este microrrelato ha sido seleccionado entre los 20 finalistas del VII Concurso Marzorrelatos, organizado por el Punto de Igualdad Municipal (PIM) de Espartinas (Sevilla) en colaboración con la Biblioteca Pública Poeta José Luis Nuñez, con objeto de fomentar la transmisión de valores igualitarios a través de la creación literaria.
El blog de Mae 
Felicidades primor, el relato merece estar entre los finalistas y ganar. Me ha gustado
mucho.
Besos.
Un abrazo fuerte y gracias por leerme y motivarme siempre, María
No me extraña que lo hayan seleccionado, ¡es muy bueno! Felicidades y un besote 😉
Mil gracias, Luna. Un beso fuerte
Muy bueno y muy original. Enhorabuena.
Muchas gracias, Carlos. Un abrazo
Me encantó, Mayte. ¡Felicidades!
Muchas gracias, Úrsula. Un abrazo
Merecido reconocimiento. Es muy bueno. enhorabuena, Mayte! Me ha encantado 🙂
Besos, amiga.
Muchas gracias por tus palabras, Lídia. Un beso
¡Me encantó el micro, Mayte! Iba sufriendo junto con la protagonista y qué gran suspiro me salió cuando se abrió el paracaídas… Ufff…! ¡Suerte
¡Un gran abrazo!
Como siempre al principio parece una cosa y luego… 😀
Por suerte era una buena experiencia. Todos deberíamos atrevernos a saltar de vez en cuando a algún vacío que nos asuste.
Saluditos Mayte! 😉
Enfrentarnos a nuestros miedos es un reto difícil… Un abrazo, Little cat
Pingback: Mi 2018 literario | El blog de Mae